“LA BESTIA”
Ahogado en alcohol mi rabia
fluye sin control alguno es hora de la bestia:
Asecho a mi victima cual lobo seduciré
con cordiales halagos
“tengo unos terneritos pequeños y
necesito que me ayuden, yo les pago mil o quinientos pesos”.
Entra en mí la posesión
demoniaca, manipulador encanto de la palabra
Vienes cargado crueles traumas
infantiles, hoy solo es violencia
La perpetua noche me empieza a
cobijar es hora de matar:
Con un golpe caes tierno ser
Las garras se abren, la sádica
tortura da inicio
Una vela encendida deja caer su
lágrima en los ojos
Estallas en dolor, dulce dolor
El cuchillo desmiembra dedo por
dedo
Cauterizo la herida, su rostro
cubierto de santidad y desesperación.
El olor a orina es muy
penetrante incluso más que la sangre
Agarro sus genitales
castrándolo de un solo tajo
Una especie de filete arracadas
de sus nalgas
Increíble como lucha por vivir,
siento placer en su tortura
Abro sus piernas y mi pene
destroza su recto
Es hora de morir pequeño
Levanto mi pie y aplasto su
rostro
Todo ha terminado
Todo ha terminado…
‹‹Eso lo hice yo. Sentía placer
al hacerle esto a los niños, aparecían con los intestinos afuera… yo quedaba
tranquilo. Claro que pensaba, “ese placer fue a costa del dolor de todos estos
angelitos”
… Luis Alfredo Garavito
INFERNO SADOGOAT