SECRETO

SECRETO CONFESIÓN

Padre hoy he venido a confesarme ante usted para que sea mi muro de lamentos:

Confieso padre que hace muchos años ya cometo aberraciones, pecados mortales, indignación y condenación eterna.

Desde temprana edad no fui socialmente aceptado por los demás, aquellos me veían de tal manera que solo se burlaban, en mi niñez, mi adolescencia fue despreciable por mi ego.

Cuando decidí que mi vida sería diferente he de servir a dios con un solo estandarte mi lema: VENGAN A MÍ LOS PUROS DE CORAZÓN.

A mi madurez la innegable sensación y atracción me hizo socapar mediante auto flagelación, reprimiendo mis instintos, fue así durante varios años hasta que a mis 25 años si mal lo recuerdo estalle en un impulso provocado por un ser tan inofensivo.

Confieso ante usted santidad que en un seminario pastoral con niñas catequistas una de ellas insinuó ante mí una actitud des cohibida del tema relacionado sobre sexo, pregunto ante mí solo ante mi si realizo el acto de masturbación, a lo cual respondí con un gesto de sorpresa, ella se abalanzo sobre mi abriendo las piernas, acaricio mi pene, trate de quitarla pero saco mi miembro y violentamente realizo la felación, como si estuviera poseída aquella señorita de apenas 13 años sonreía a ver mi rostro. Llene su boca con mi esperma, ella gustosa se lo trago pasando por sus labios su lengua… caí agotado en un sueño placentero.

Al siguiente día pregunte sobre aquella señorita, pero nadie la había visto, seria acaso que he sido tentado por el mismo diablo.

Sería un juego de mi mente, varios meses después una niña así mismo de unos 7 años de edad con un collar que llevaba a un cristo sin cruz solo era el colgado muy bello, estaba esperando a su madre que realice sus actividades como encargada de limpieza en el atrio. Al verme solo ella camino hacia mí con un gesto de juego me pide que la lleve al baño y estando ahí baja su interior mostrándome su vagina, diciéndome si le limpio, a lo cual estire mi mano con papel higiénico ella tomo mis dedos introduciéndolo uno a uno, me aleje y mi erección era notoria, indique mi pene a la niña y ella sorprendida agarra mi miembro y juega con él, ella se ve feliz y arroje mi semen en su rostro explotando de carcajada, ella salió con su madre.

Cuando pregunte por la señora y su hijita nadie supo darme respuesta.

Aun más recuerdo un día escuchar jugando a unos niños, eran tres niñas, al acercarme observe a una de ellas con rasgos masculinos y pregunte su nombre respondiéndome Alex, eres un niño pregunte! Siendo interrumpido por las dos niñas, es mi hermano me dicen en tono de burla es un marica, le gusta vestirse de mujer, el niño me abraza y me dice es que me gustan los niños eso quiere decir que soy una mujer verdad? Pregunto!

Al ver su rostro triste saque mi pene y lo mostré, te gusta esto? Y él me sujeto y lo lamio lentamente, disfrutándolo, saboreaba mis testículos, las niñas se acercan y ven asombradas hasta excitadas por este proceder de su hermano, lo coloque de espadas y poco a poco penetre su ano, masturbándolo; luego veo unas manos eran las hermanas que abren sus piernas y Alex penetra a la una y luego a la otra, quise con fuerza entrar en sus vaginas pero no lo lograba, una de ellas agarra mi miembro y lo introduce hasta la mitad en su ano, es ahí cuando una a una empezaron a caer como en un sueño estranguladas… acaso fue otra ilusión perturbadora, así solo y como las otras ocasiones desperté y no existía nada ni nadie.

Así diría pasaron años y años sobre actos y actos que nunca comprobé fueron verdad o solo simples trampas de mi mente en el que danzan las marañas de satanás.

Hasta el día de ayer lo pensé ya que estos años siempre tenía presente a alguna actividad pedófila cada semana y nadie me daba razón de su veracidad. En la mañana fui como de costumbre a el sector de las fosas antiguas que están en la iglesia, al estar limpiándolas observe un vestido rojo cubierto de tierra, al sacarlo descubrí un cuerpo era una niña, luego seguí buscando y encontré más de 39 cuerpos apilados en una de las fosas, vi entre ellas unos restos diferentes era de una mujer que sostenía a otros restos pequeños y entre ellas el collar de un cristo sin cruz. Eran ellas! todos estos años estaban aquí asesinadas… corrí a mi dormitorio y vi como revelación unas botas, una pala oxidad cubierta de tierra, mire a el espejo entre sombras me vi realizando estos crímenes. Era yo todo el tiempo… dios mío perdóname.

Ahora ente usted padre me confieso, el secreto de la confesión me protege así he de liberar mi culpa, he visto mi forma de purga ahora sí y conscientemente he de disfrutar de este don otorgado por nuestro padre, el necesita ángeles en el cielo, yo los enviare.

VENGAN A MÍ LOS PUROS DE CORAZÓN.

INFERNO SADOGOAT