Cínico kyon

Cínico kyon

 

La fétida conciencia emanada en los instintos básicos del acongojado monasterio sexual

 

Sátiras o diatribas

En un burlesco patio gigante danzan lúgubres éticas que empañan el brillo de la naturaleza perversa del ser humano

Paso a paso  van marcando un estandarte de hipócrita apariencia, mientras sus fluidos se detienen en prendas para evitar su hedor apetitoso

Vi en ojos de inocencia la más maliciosa y perturbada imaginación, en su cuello un collar de castidad con un bozal para evitar que la bestia muerda, ataque

En grandes cavernas con cristos escuche a su pastor gimiendo por el pecado evitado, no puedes detener la mente serás castrado, un cerdo menos que procreara

A trabadas de limitantes cuerpos llenos de vida ya que en ella mora, sin sentimientos la perfección seria creada pero se retuercen en miedos y voluntades masoquistas es así que mujer libérate cual perversa eres, deja la consigna matrimonial que la sabia del semen bañe tu cuerpo hermoso  (L)

Hastías morales resecan los órganos reproductivos, y que es de ellos sin el placer que otorgan, mil orgasmos se consumieran cada luna, y en cambio solo facetas de sentimientos obtenemos, el corazón late mil veces con el roce de miembros en vaginas, anos, pezones, que con la más cálida canción poética y escrito de amor, engaños; todo  es un engaño

La fétida conciencia emanada en los instintos básicos del acongojado monasterio sexual, buitres acechando la carroña con una estabilidad perpetua ennegrecida imagen del porvenir, una idea planteada, sodomizada, reprimidos contra cristo, morales y castidades existentes, mira estos son nuestros cuerpos ellos están vivos mata la conciencia reprimida, coge un hacha descuartiza al mártir, ellos son los muros que detienen la felicidad, devora sus órganos que sean un afrodisiaco existencial, vivimos y lo mejor es disfrutar en un orgásmico estallido anti reproductivo, humanidad asechada con sombras de derechos humanos, seremos juzgados por liberta - llamada libertinaje, la felicidad puede verse horrible en sus manos, mis ojos gimen en placer extasiados  al destruir la moral, sus muros, su estúpida conciencia de la vida por el pecado llamado placer!