SÁDICO
Sedúceme miserable
carroña, no puedes defender tu asquienta existencia, mis dedos como armas
empuñando contra frágiles monstruos.
Le agrada el hedor
del terror, es una fragancia delicada cunado su vagina sangre brota, no eres
más que un animal, gimiendo y llorando.
¡Ahora debes morir
muerde el infierno!
Su cuerpo cae en
mis piernas, maldito!!!
Eres un asesino,
ese niño aguarda muy dentro, convertido en una infección psicótica; aguarda,
espera
He muerto ya el
niño ultrajado - soy un ángel que busca liberarse de su cuerpo pecaminoso.
¡A los débiles
guaguas porque!
Dios me ha
abandonado todos me persiguen, soy un cruel gritan ¿tu sentiste el pene cuando
niño?
Ahora entiendo debo
hacer tu trabajo para que no desconfíen de ti mi señor.
Mas el diablo frente
a mí se ha postrado a dialogar sin tapujos, señaló mis condenas y un lugar en
ese frio infierno. No necesito de Dios me susurro.
Satanas ocultara mi
sanguinaria sed, con la inofensiva imagen de una Marioneta ambulante, debo ser
cauteloso con la mórbida desesperación que aguarda una víctima.
Mis aberrantes
instintos, en ansias explotan como la espuma del rabioso can.
-Niña quieres
dulces ¿Si? Sígueme-
Te he buscado una y
otra vez
Te he destruido
hasta el cansancio
Pero sigues
presente en mi recuerdo
-Que dices… debo
estrangularte, está bien pero no me hagas daño…- por un momento me paralice
-¡no corras,
detente!-
La muchedumbre me
señala, Sádico
No comprenden lo
horrendo del insulto, prefería morir fríamente, y no en sus bocas.
-¿Dónde estaban
ustedes para defenderme, cuando niño?-
Ustedes pervertidos
seres, sacerdotes deseando al prójimo, prostitutas, ladrones, drogadictos,
viciosos, hipócritas, parricidas.
¡Ustedes son el
semen que germino mi ser, soy su homenaje, el sádico y la victima!
INFERNO SADOGOAT
No hay comentarios:
Publicar un comentario